El secreto de la ventana

Miro la ventana en mi techo, esta mañana luce encantadora como blues de madrugada. Ella me mira fijo y parpadea, quizá nunca nadie la entienda, en sus ojos se encuentra su otra realidad. Ramas acarician su mente, puede que espere a que regresen las que se llevo el viento, pues ella no olvida y mira, parece tan transparente. Espera pasar el invierno para poder columpiarse y romper el espejo, donde se mira cada día. Tan descolorida y vacía se siente que sin más que perder decide saltar, caer del otro lado, donde los colores bailan junto al cielo, manchando de melodías las hojas y el viento en su movimiento.
El secreto de la encantadora ventana, que esperaba y esperaba, observando y parpadeando, lo entenderé cuando algún día baje mi persiana, tal vez hoy no era el día, quizá hoy no era su día. En algún momento romperá con el miedo, creará su liberación y al fin un suspiro de satisfacción regalará al viento.
 
 

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