Devuelta

Abre los ojos y la ira navega suavemente por sus venas, no logra evitar tal sensación, no hay ganas, la desilusión durmió con ella esta noche y con un sueño la despertó de lo que por un rato había olvidado.
Las sabanas la envuelven sin darse cuenta, y el reloj solo sigue su camino dependiendo de cada respiración, cada paso, sin saber que en realidad ellos dependían de el.
Ella no quiere hablar y tampoco escuchar lo que sabe que solo la desilusionaría, las palabras que parecían de felpa hoy son ásperas y lastiman su piel.
Mañana sera todo devuelta, ojala no.

Comentarios

Entradas populares